De adolescente a adolescente: los consejos de otros sobrevivientes de tiroteos masivos para los chicos de Parkland
Alrededor de las 4 pm de este miércoles 14 de febrero, cuando no habían pasado ni dos horas del tiroteo que hasta ahora cuenta 17 víctimas mortales en un colegio de Parkland, Florida, un llamado PTSD-throwaway (Desorden post-traumático-desechable) publicó en Reddit una serie de consejos dirigidos a los adolescentes que sobrevivieron, afirmando que hace 3 años, cuando fue herido y sobrevivió a un tiroteo, le habría gustado recibir algún tipo de guía sobre el proceso que le esperaba.
Sus recomendaciones claramente consideran el estado de confusión y vulnerabilidad de los chicos que ya pasaban por una etapa vital complicada de por sí:
• No beban ni se droguen para hacer frente a la situación. Mejor recurran a una terapia con la tranquilidad de que su costo será cubierto por el gobierno del Estado de Florida hasta que estén mejor.
• Durante un periodo indefinido de tiempo tendrán una inusual sensación de inseguridad y miedo, deben saber que es natural y que pasará eventualmente.
• Comprométanse activamente con su recuperación, sin importar la cantidad de tiempo que les lleve salir de esto.
• Pidan a sus consejeros escolares o a trabajadores sociales de los hospitales que les recomienden a terapeutas calificados para tratarlos.
• Pueden recurrir al Programa de Compensación de Víctimas de Florida y a la Fiscalía General de Florida para pedir ayuda.
• Al recibir esta ayuda sus padres tendrán que hacerse cargo de mucho papeleo; si no pueden hacerlo, vayan a un hospital y pidan a un trabajador social que les recomiende a un defensor de víctimas que lo haga.
• Prepárense para el impacto negativo de escuchar los fuegos artificiales en celebraciones como el 4 de julio o Año Nuevo. Que no los tomen por sorpresa.
• Estén pendientes de estos síntomas de estrés post-traumático: pesadillas, miedo constante, profunda tristeza o enojo, falta de concentración y de control mental, desórdenes alimenticios, dolores de cabeza o de estómago, agorafobia, desconsuelo y la sensación de que alguien les ha robado su vida, entre otros. Si no desaparecen en un tiempo razonable es señal de que necesitan ayuda profesional.
El club al que nadie, nunca, querría pertenecer
El conformado por los sobrevivientes de tiroteos masivos es un grupo unido por el terrible trauma de la tragedia colectiva. En EEUU el número de personas que subsisten a este tipo de ataques aumenta cada año, por lo que algunos de ellos se han organizado para ayudar y dar apoyo gratuito a los que hoy atraviesan por lo que ellos pasaron antes. Es el caso de un grupo de sobrevivientes del tiroteo en la secundaria Columbine que dejó 13 muertos y 24 heridos en abril de 1999. El organismo The Rebels Project, integrado originalmente por exalumnos de Columbine crece continuamente sumando entre sus a sobrevivientes de otros tiroteos.
Missy Mendo forma parte de The Rebels Project. Tenía 14 años cuando sobrevivió al tiroteo en la secundaria Columbine, y apunta que una de las dificultades de la recuperación para los supervivientes estriba en el hecho de que el duelo impacta a la comunidad entera: “Es una batalla muy complicada para alguien tan joven. No te das cuenta de que tus padres y tus maestros también están pasando por esto y que al mismo tiempo que se encargan de los chicos, tienen que encargarse de sí mismos.”
Sin embargo, dice, es a esta misma comunidad bañada por la desgracia a la que los jóvenes deben recurrir en su proceso de recuperación: “Es sumamente importante apegarse a la comunidad que te hace sentir cómodo y a salvo, ver los rostros de tus amigos y pasar tiempo con ellos.”
Para estos adolescentes, la tentación de enmascarar o evadir el dolor emocional estará ahí, pero lo que tienen que hacer es permitirse sentirlo y recargarse en su comunidad para empoderarse colectivamente.
Mendo y Kristen Krueger, que sobrevivió al mismo tiroteo cuando tenía 17 años, compartieron con Univision Noticias los mejores consejos que pueden dar a los adolescentes que hoy se enfrentan a este duelo colectivo:
• Sean amables y pacientes consigo mismos. Pasarán por períodos buenos y por períodos horribles, pero no habrá un retroceso.
• Dense tiempo para procesar y lidiar con su dolor.
• Consigan ayuda profesional si sienten que la necesitan.
• Si necesitan un tiempo consigo mismos para encontrar la calma está bien, pero no se aíslen.
• No tengan miedo de hablar sobre su experiencia. Empiecen a hacerlo tan pronto como puedan con alguien con quien se sientan a salvo, una madre, un amigo, otro familiar, otro sobreviviente. No tiene que ser alguien de su escuela.
• Si requieren apoyo de un sicólogo o siquiatra para su salud mental, sepan que no tienen que quedarse con el primer terapeuta que se cruce en su camino si no se sienten cómodos hablando con esa persona. Busquen otro con el que se sientan cómodos.
• Acudan a organizaciones como The Rebels Project para conseguir más apoyo, cuentan con sobrevivientes voluntarios en todo el país que donan su tiempo para a escuchar y orientar a otros sobrevivientes en su recuperación a largo plazo. Pueden recurrir a ellos en cualquier punto de su vida.
• Defiendan y validen sus ansiedades y sus miedos. Solo ustedes como sobrevivientes pueden sentir cuándo están listos para superarlos y cada individuo tiene su propio margen de tiempo.
• No permitan que nadie, ningún doctor, familiar o amigo, les diga que ‘deberían superarlo’ o que ‘no deberían sufrir si no fueron heridos o si no vieron nada’. Sus experiencias importan y ustedes no son menos víctimas ni menos sobrevivientes que quienes fueron heridos físicamente.
• Sepan que pueden y van a curarse, y que llegará el día en que no los aterre cualquier sonido, en que dejen de tener pesadillas y en que dejen de desconfiar de cualquiera. Toma tiempo y esfuerzo curarse, pero pueden hacerlo.