Faltó al trabajo más de 2 años y lo despidieron, pero demandó a la empresa y les ganó el juicio

Vic Rumbold, un trabajador de la automotriz Jaguar Land Rover, acaba de ganar una batalla legal en contra de la empresa donde trabajó por veinte años, luego de alegar que fue despedido injustificadamente.
El caso se hizo conocido debido a que Rumbold faltó a su trabajo durante 808 días por licencias de enfermedad, un hecho que sus empleadores argumentan jamás haber visto antes.
Según el diario inglés Birmingham Live, Rumbold, que trabajaba en la planta principal de Castle Bromwich en Inglaterra, estuvo ausente por varias razones durante sus casi 20 años en la empresa.
"No acudió al trabajo por motivos de salud, lesiones en el trabajo y, en una ocasión, por una presunta agresión personal", señaló la publicación.
De acuerdo a Jon Carter, uno de los gerentes de la empresa, las ausencias de Rumbold fueron extralimitadas y marcan un fatal precedente para la compañía.
" Honestamente es el peor récord de ausencias que he visto en mi vida: 808 turnos sin trabajar, el precio de sus días no laborables para la compañía fue de casi 123,000 dólares. No hubo ni un año desde el 2000 en que este empleado tuviera un récord de asistencia completo", indicó Carter.
"Hubo un mal despido en su caso"
Pero a pesar de ese historial de ausencias, el despido de Rumbold se realizó de manera incorrecta, según dictaminó el juez encargado de la demanda.
"La empresa no llevó a cabo los procedimientos correctos antes de despedir al señor Rumbold en diciembre del 2018 por motivos de conducta y capacidad", dijo en su sentencia el juez que escuchó el caso, quien argumentó que la compañía de autos no aplicó adecuadamente las reglas estipuladas en el código de Procedimientos de Gestión de Asistencia (AMP) y que no había llegado razonablemente a una etapa en ese proceso en la que pudieran considerar el despido del empleado.
“En el mejor de los casos, si el AMP se hubiera aplicado correctamente, ambas partes habrían llegado a una etapa en la que el demandante podría haber recibido asesoramiento o una advertencia sobre sus ausencias y la necesidad de mejorar para evitar una sanción adicional", dice el fallo, resaltando que el despido no era una sanción que estuviera dentro del rango de respuestas razonables disponibles para ellos según la ley.
El juez ordenó al gigante automovilístico pagarle a Rumbold una cifra cercana a los 130,000 dólares por concepto de pago por enfermedad e indemnización por despido injustificado.
Un empleado con muchos problemas de salud
Rumbold, que trabajaba en la línea de montaje de automóviles, experimentó problemas en la cadera a principios del 2018, además le diagnosticaron necrosis avascular, una enfermedad que causa dolor crónico.
"Debido a este padecimiento, el empleado no pudo trabajar del 12 de marzo al 13 de agosto de ese año. Se necesitaba una operación de reemplazo de cadera que habría dejado al señor Rumbold fuera de acción durante 12 semanas más. Cuando la empresa se enteró de la discapacidad, le hicieron al empleado varias pruebas para roles alternativos", señaló su defensor, aduciendo que en ese momento lo cambiaron de trabajo y le asignaron inspeccionar los números de registro de los vehículos, una labor que le permitía sentarse y usar su bastón, pero dicha labor duró menos de un mes.
En noviembre del 2018, la empresa cambió a Rumbold a trabajar como sellador al final de la línea de pintura de los vehículos, un rol que hacía con dificultad porque según él, significaba caminar alrededro de cada automóvil por lo menos cuatro veces.
Rumbold afirmó que en ese momento se le prohibió usar su bastón por temor a que dañara la carrocería de los motores, además que en el último año le negaron sus vacaciones.