La terapia génica podría ofrecer una esperanza para el alcoholismo severo, según un estudio
El hallazgo de un grupo de investigadores podría dar nuevas esperanzas para quienes sufren de alcoholismo.
Científicos de la Universidad de Oregon publicaron un estudio en la revista Nature Medicine que encontró que una terapia experimental inyectada en el cerebro de monos redujo drásticamente su consumo de alcohol en el transcurso de un año.
“Sabemos que podemos hacer que las personas con alteración por consumo de alcohol dejen de beber por periodos cortos de tiempo”, explicó Kathleen Grant, neurocientífica que participó en el estudio, a la revista Wired. “Pero el deseo de volver a beber a menudo reemplaza a tomar sus medicamentos”.
Es por ello que Grant, junto con un grupo de investigadores, probaron un nuevo enfoque para tratar el alcoholismo: utilizar la terapia génica para restablecer la vía de la dopamina en el cerebro.
¿Qué es la terapia génica y por qué podría ayudar en el tratamiento de adicciones?
La terapia génica es una forma experimental de tratamiento que usa la transferencia de genes a la célula de un paciente para curar una enfermedad, de acuerdo con el sitio genoma.gov.
En el estudio citado, los investigadores aumentaron la producción de la señal química dopamina, que se cree que está involucrada en las adicciones, lo que resultó exitoso entre los monos que formaron parte del análisis.
Actualmente, el tratamiento principal para el abuso de alcohol son las terapias de conversación. Si bien existen algunos medicamentos que se pueden usar para reducir el consumo de alcohol, no funcionan para todos.
Las personas que han bebido cantidades excesivas de alcohol, a menudo, tienen niveles más bajos de dopamina en ciertas regiones del cerebro.
“Esto contribuye a que las personas necesiten alcohol por [sentimientos de] recompensa”, subrayó Grant.
Las muertes relacionadas con el consumo de alcohol siguen siendo un problema importante en los Estados Unidos, con un estimado de 140,000 muertes anuales por causas relacionadas con el alcohol, según el Instituto Nacional sobre el Abuso del Alcohol y el Alcoholismo de los Institutos Nacionales de la Salud.
El nuevo estudio describe una forma de tratamiento que alteraría permanentemente el cerebro a través de una cirugía, por lo que la terapia se limitaría a las personas con las formas más graves de trastorno por consumo de alcohol, explicó Grant, de acuerdo con la página oficial de la Universidad de Oregon.
“Sería más apropiado para las personas que ya han demostrado que los enfoques terapéuticos normales no funcionan para ellos”, comentó Grant, sobre este posible descubrimiento. “Es probable que causen daños graves o se maten a sí mismos o a otros debido a su consumo de alcohol”.
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