El desventurado caso de un hombre que contrajo tres enfermedades distintas por la picadura de una garrapata
Una diminuta enfermedades completamente distintas en un hombre de Oregon, cuyo desventurado caso fue documentado por sus doctores en la revista científica BMJ Case Reports.
El paciente en cuestión, de 70 años, llegó a la sala de emergencia con fiebre, náuseas, dolor en la pierna e inflamación en el tobillo. Pero, además, tenía anemia, nivel bajo de plaquetas y falla renal aguda.
Contó a los médicos que un mes antes, durante un viaje al noreste del país, notó una picadura en el mismo tobillo que ahora estaba inflamado, lo que llevó a los doctores a sospechar que era una enfermedad ocasionada por una garrapata.
Lo que nunca imaginaron es que las pruebas revelarían que no se trataba de uno, sino tres de los males que puede causar este diminuto insecto de ocho patas: dio positivo para las bacterias que causan enfermedad de Lyme ( Borrelia burgdorferi), anaplasmosis ( Anaplasma phagocytophilum) y para el parásito que transmite la babebosis ( Babesia microti).
Que una garrapata contenga varias bacterias a la vez no es raro, pues están repletas de gérmenes, pero sí lo es el que ocasione todas esas infecciones simultáneamente, escriben los especialistas en el estudio de caso.
De todas las enfermedades que puede desatar la picadura de una garrapata, la de celebridades la han padecido. Uno de sus síntomas más típicos de es una erupción muy particular, en forma de tiro al blanco, que aparece de 3 a 30 días después de la mordedura. También puede haber fiebre, escalofríos, dolor de cabeza y dolor muscular.
Detectar a tiempo la picadura es fundamental pues, si se inicia el tratamiento con antibiótico durante las primeras 72 horas, se puede evitar el desarrollo de la enfermedad que, una vez presente, puede perdurar por meses.
La anaplasmosis suele presentarse de una a tres semanas después de la picadura con síntomas como cansancio extremo, fiebre y dolor estomacal. El parásito que ocasiona la babebosis ataca los glóbulos rojos y puede desencadenar problemas renales y de la sangre. Si no se trata a tiempo, puede ser mortal, advierten los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades.
A veces estas enfermedades son difíciles de diagnosticar pues sus síntomas pueden confundirse con otras. Las garrapatas también pueden ser portadoras de otros males como la fiebre de las Montañas Rocosas, la enfermedad del virus Powassan y la turalemia.
Por suerte, los médicos en cuestión atinaron en sus sospechas y el hombre logró recuperarse satisfactoriamente mediante un tratamiento con tres tipos de antibióticos.
Cómo evitar que esto ocurra
La mejor manera de protegerse contra estas enfermedades es evitar la mordedura de las garrapatas, que suelen habitar en la grama, arbustos o la piel de animales como los venados. Si vas a estar al aire libre asegúrate de usar repelente, vestirte con pantalones y camisa manga larga y de revisar tu cuerpo cuando regreses a casa.
Para remover una garrapata adherida en alguna zona de la piel usa pinzas y procura agarrarla lo más cercano a la cabeza que sea posible. Luego jala hacia arriba. Es importante no utilizar remedios caseros para quitar las garrapatas, como cubrirlas de barniz de uñas o de vaselina, o aplicarles calor hasta que se desprendan de la piel.
