Steve Scalise, el congresista herido de bala, un férreo defensor de las armas
El congresista Steve Scalise recibió un disparo en la cadera en el tiroteo de este miércoles por la mañana en una práctica de béisbol en Alexandria, Virginia, cerca de Washington DC.
Scalise representa al distrito 1 de Luisiana, tiene 51 años y, tras los sucesos de hoy hay quienes lo verán como una paradoja, es un férreo defensor de la Segunda Enmienda.
Ha patrocinado y copatrocinado varios proyectos de ley relacionados al derecho a llevar armas, entre ellos uno para restablecer la Segunda Enmienda en el Distrito de Columbia.
Según su biografía, su radical posición de proarmas le ha valido una calificación A + (la más alta) de la Asociación Nacional del Rifle ( NRA), la mayor organización de lobby a favor de la Segunda Enmienda.
Cuando en 2016, el entonces presidente Barack Obama impulsó medidas de control para la venta y compra de armas, como chequeo previo de antecedentes policiales y de salud mental del comprador, Scalise se opuso y dijo: "Estamos hablando de que si alguien tiene un algunas armas que le quiere vender a un amigo o darle a su hijo, va a tener que registrarlo en el gobierno federal".
Es el funcionario del partido designado para mantener el orden entre sus en el Congreso (en inglés esa posición se conoce como whip), por lo que es el encargado de asegurarse de que sus pares voten y de que haya suficientes votos para obtener aprobaciones clave. Tal es el caso de la derogación de Obamacare.
Scalise supervisa a un equipo de diputados y fue clave para aunar el apoyo para el proyecto de ley de salud republicano.
Cuando en mayo de 2016 Donald Trump era el nominado presunto del Partido Republicano, Scalise le dio su apoyo y desde entonces ha estado en esas filas.
En su página del Congreso, el congresista se define como un "fuerte conservador que defiende la Constitución". Menciona como sus principales causas a defender "impuestos más bajos, una estrategia energética nacional, una defensa nacional sólida y valores conservadores".
Scalise es descrito como un conservador pragmático que ha intentado ser el puente de unión entre los republicanos mas duros y conservadores y los republicanos de corte más tradicional.
Según informa CNN, cuando Scalise intentaba convertirse en el whip de la mayoría de la Cámara de Representantes, un escándalo lo ensombreció al revelarse que él había hablado con un grupo dirigido por el ex líder del Ku Klux Klan, David Duke, en 2002.
Scalise dijo que fue un error y se disculpó por ello. El entonces presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, lo apoyó al igual que el congresista afroamericano y demócrata de Luisiana, Cedric Richmond.
Fue ingeniero de sistemas informáticos antes de comenzar su carrera política. Antes de llegar al Capitolio de Washington, se desempeñó como congresista y senador estatal en Luisiana. Desde 2012 ocupa su escaño en el Congreso nacional.
