¡Relájate con estos trucos! Y mejorarás tu salud mental
El estrés al que estamos sometidos cada día puede hacer que lleguemos a sentir ansiedad como una forma de recordarnos que tenemos que reducir la velocidad de nuestras vidas. Es cierto que esto es difícil porque entre el trabajo, los quehaceres diarios, la casa, los niños, pagar las facturas y vivir... se nos va el tiempo y un día de 24 horas debería durar 48 para que pudiera ser productivo, ¿verdad?
Pero esta no es la realidad de nuestras vidas y el día no tiene más de 24 horas y debemos ceñirnos a esas horas para poder hacer todo lo que tenemos pendiente y además, poder vivir. Las personas que tienen trastornos de ansiedad lo pueden tener incluso más difícil, y puede que sientan que eso de relajarse puede ser todo un lujo sólo apto para algunos.
La relajación es una necesidad
Pero la realidad es que la relajación no es un lujo, es una necesidad que todas las personas necesitamos cada día de nuestras ajetreadas vidas. Por eso tendrás que tomarte tu tiempo para relajarte y poder cargar las pilas, para que de este modo, tu cuerpo y tu mente esté en mejor funcionamiento.
Por si fuera poco el estrés físico y psicológico tiene consecuencias a largo plazo, por esto utilizar tan sólo 5 minutos diarios para relajarte, tendrá recompensas a largo plazo que te merecerán la pena.
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Involucra a todos tus sentidos
Es importante que actives a todos tus sentidos cuando estés haciendo técnicas de relajación. De esta manera podrás tomar conciencia y mantener la concentración en tu sensación de calma. Notarás como las sensaciones que quieras sentir serán todo un placer, ¿quieres sentir que el agua caliente recorre tu piel y que además tiene un dulce aroma a menta? Cierra los ojos y deja que el olor de tu loción para el cuerpo te ayude a relajarte o que el sonido del agua de la ducha es más que un sonido mientras cae por tu piel.
Elije momentos conscientes
Es importante que selecciones en tu rutina diaria un momento y un lugar que te ayude a prestar atención y a ser consciente de tu estado de ánimo. Para ello:
¡Disfruta del momento! Elige un momento en el que no tengas que ser multitarea, es decir, aprende a disfrutar del momento. Para ello, por ejemplo, si por la mañana estás preparando el café, puedes pasar unos minutos apreciando el aspecto y el olor del café, disfruta del sonido que hace la cuchara al dejar el café en tu taza... disfruta de su elaboración y después te resultará aún más exquisito.
Y por supuesto... siempre que puedas, respira hondo para oxigenar tu mente y sentirte más relajada. Ten tiempo para ti aunque sólo sean 5 minutos. ¡Tu salud mental lo agradecerá!
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